Liderar duele cuando lo haces desde el cansancio

Hace algunos años, trabajé con Laura, una ejecutiva exitosa que creía firmemente que el liderazgo verdadero implicaba sacrificio personal. Para ella, trabajar hasta el agotamiento era un signo de compromiso y devoción. Laura pensaba que, para ser respetada y admirada, debía estar siempre disponible, sin importar cuán cansada estuviera. Sin embargo, esta mentalidad la llevó a un inevitable burn out, que no solo afectó su salud física y emocional, sino también la dinámica de su equipo, que comenzó a reflejar su estrés y fatiga.

Identificando el problema

El caso de Laura no es único. Muchas personas en posiciones de liderazgo creen erróneamente que estar constantemente ocupados y al límite es sinónimo de eficacia. Sin embargo, liderar desde el cansancio perpetuo no solo es insostenible, sino que también es contraproducente.

Un líder agotado no puede inspirar ni motivar adecuadamente a su equipo y corre el riesgo de propagar una cultura de agotamiento en toda la organización.

Lo que McKinsey nos enseña sobre el liderazgo

Las investigaciones de McKinsey destacan la importancia de un liderazgo equilibrado, en el que se prioriza tanto el bienestar del líder como el del equipo. McKinsey enfatiza tres pilares esenciales para un liderazgo efectivo:

1. Mente clara: El enfoque debe ser hacer preguntas valiosas, no solo resolver problemas inmediatos.
2. Cuerpo equilibrado: Cuidar la salud física y respetar los ritmos de trabajo y descanso.
3. Espíritu conectado: Tener una motivación interna clara y una visión inspiradora.

La importancia de cuidar la energía personal

«Proteger nuestra energía personal no es un lujo, es una necesidad» 

Un liderazgo efectivo requiere que el líder esté en su mejor estado físico, mental y emocional. Esto permite tomar decisiones más acertadas, reaccionar de manera adecuada ante el estrés y servir como fuente de inspiración para el equipo. Cultivar nuestra energía es, en realidad, nuestro superpoder más grande.

¿Cómo construir hábitos saludables para el cuidado de la energía personal?

1. Define tu propósito diario: Al comenzar el día, reflexiona sobre lo que realmente deseas lograr y por qué. Esto te ayudará a mantener el enfoque y la motivación.
2. Crea rituales de autocuidado: Incorpora pequeños rituales diarios que fomenten el bienestar, como meditación, ejercicio o simplemente un tiempo para desconectar.
3. Inspírate primero: Antes de intentar inspirar a otros, asegúrate de llenar tu propio tanque emocional. Lee, escucha música, o haz cualquier actividad que te recargue.

En conclusión, liderar con energía y desde un lugar de bienestar integral no solo mejora tu efectividad como líder, sino que también transforma positivamente la dinámica de todo tu equipo. 

Te invito a explorar más sobre este nuevo enfoque de liderazgo en el primer episodio de “Happy Human”, donde profundizamos en cómo ser un líder con propósito y energía. 

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¿Y si te dijera que el activo más estratégico que tienes no está en el Excel… sino en tu energía? Según McKinsey, los líderes de este siglo necesitan tres cosas: 🧠 Una mente clara → No para resolver todo, sino para hacer preguntas que valgan la pena. 💪 Un cuerpo equilibrado → Porque dormir mal no es un *badge of honor*, es sabotaje disfrazado de productividad. 🔥 Un espíritu conectado → Porque si tú no sabes por qué haces lo que haces… ¿quién lo va a saber? No puedes liderar a otros si no puedes liderarte a ti mismo. Energía no es un lujo, es tu superpoder. #liderazgo #leadership #happyhuman #happyworkplace #liderazgopersonal #desarrollopersonal #motivacion #motivacionpersonal

♬ original sound – Delmy Alvarenga

Fuentes:

McKinsey, «The Art of 21st Century Leadership: From Succession Planning to Building a Leadership Factory,» disponible en: https://www.mckinsey.com/capabilities/strategy-and-corporate-finance/our-insights/the-art-of-21st-century-leadership-from-succession-planning-to-building-a-leadership-factory. Visitado el 10 de abril 2025.